TÚ|

TÚ| Comprendo desde el pedazo de ti que se cayó en algún rincón de mi boca, hasta los rincones mismos de la tuya. Y sin la cursilería que remite todo aquello, me libero y te contesto tu declaración de sacudidas varias…haciendo alusión a las mías correspondientes, a mi incapacidad de ocultar lo sentido, lo vivido, lo post rosado de anoche.

Y zas! un arrebato de voz para no poder explicar nada, para unas lágrimas malas que caen amargas intentado decir lo que la voz no quiere… lo que la mente nubla, lo que yo misma intento descifrar en la nebulosa de espanto que me ataca ahora… que me sitúa dentro de ella y sin una escapatoria lógica, que persuada la evidente y atacante confrontación inminente.

No hablo de ti, de lo que eres. No hablo de eso, sino de mi situación terricolense, que nada… sólo me toca, y punto. Después de la inercia, claro.

Zas! no me hago cítrica porque sabemos bien que no lo soy, me hago dura, me sale cuero por todos lados, me vuelvo acorazada… me no sé, me auto refiero todo el rato.

Y TÚ, ahí parado, ahí sentado, acostado, o frente a cualquier libro; me consuelas después de la extrañeza que se me hace el pensar en lo que hubo antes de c-yo, no recuerdo… se me hace invisible, se me hace tan presente… que no lo puedo ver.

Y sé que estabas, siempre estabas, en cada recreo y en los almuerzos, y en las salidas… en las entradas, en todo. No sé cómo pudiste aguantarme, creo haber sido poco cordial.

Para el caso da igual, si todos los caminos llevan a un Roma, como peregrinaje, como tour, o vía tren. Llegan al Roma deseado, sea a mal traer, o victorioso… pero llegaste. Pero me disculpo de todas formas.

Tampoco sé qué te propones, yo tampoco sé qué proponerme. Pero recreo el cuadro payasesco de ayer… no me arrepiento, porque ser ingenuamente un sadclown, me da la posibilidad de hacerte un coqueteo maldito que le dé sal al huevito que lo desea (TÚ claro).

Y sí, mariposas y retorcijones varios. Dormidas extrañas, extrañas el sueño, la paz… somos guerra Pietro, en los sueños sí.

10/01/2007